El alca gigante fue un ave del género pinguinus. Este género pertenecía a la familia de los álcidos, y las especies que formaban parte de él tenían la peculiaridad de no poder volar debido al tamaño de sus alas respecto a su peso. De hecho, el parecido del alca gigante con los pingüinos cuando fueron visto por primera vez por los ingleses hizo que les llamaran por el mismo nombre, pese a que ambas especies nunca estuvieron emparentadas (caso ejemplar de evolución convergente). Esta ave pesaba en torno a 5 kilos, y media entre 75 y 85 centímetros de altura, siendo de este modo el animal más grande de la familia de los álcidos.
Pese a su gran agilidad en el agua, era un animal extremadamente patoso en tierra, siendo bastante fácil cazarlo por todos sus depredadores, entre los que además de los osos polares y algunos tipos de águilas se encontraban los humanos. Durante más de 100.000 años fueron cazados por el hombre, siendo un manjar importante en distintas culturas paleolíticas y neolíticas de América del Norte y Europa, tal y como muestran las punturas encontradas algunas cuevas datadas en 35.000 años de antigüedad.
El progreso y la evolución cultural en Europa a finales de la Edad Media, y su consecuente crecimiento de población, provocó que la demanda de carne del alca gigante creciera en exceso, llevando a la extinción de las comunidades de este animal en Europa a lo largo del siglo XVI.
Algunos escritos del siglo XVIII y comienzos del siglo XIX comentan cómo el sabor de su carne no era del todo agradable, pero la facilidad de capturarlo, así como lo sencillo de coger sus huevos, hizo que siguiera siendo fuertemente perseguido por los marineros que cruzaban el Océano Atlántico.
En torno al año 1800 se cree que el alca gigante también se extinguió de América del Norte, quedando únicamente relegada su existencia a Islandia e islas del alrededor, entre la que destacaba Geirfuglasker, lugar donde muchos marineros se detenían para aprovisionarse de su carne. Fue entonces cuando las cercanas localidades de Kyrkjevogr y Utskála comenzaron a pedir la mitad de la caza de los marineros por cazar en su territorio. Eso, unido a que era una zona rocosa y de difícil acceso permitió a los alcas gigantes mantener su existencia unos años más.
Con las Guerras Napoleónicas, varios barcos llegaron a la isla de Geirfuglasker arrasando con prácticamente la totalidad de las alcas sin siquiera tener en cuenta los tributos que debían pagar. 20 años, en 1830, después de que un fuerte terremoto en la isla de Geirfuglasker hizo que ésta quedase sumergida bajo las aguas, las pocas parejas de lacas existentes tuvieron que emigrar a otras zonas de Islandia donde fueron cazadas impunemente. :(
El hecho de que cada vez esta ave fuera más rara despertó el interés de varios coleccionistas europeos que comenzaron a pagar grandes cantidades para hacerse con un ejemplar o simplemente la piel del alca gigante. En tan sólo 10 años los pocos ejemplares de alca desaparecieron por completo. Los últimos ejemplares de alca gigante fueron cazados el 3 de julio de 1844 cerca de Geirfuglasker, dejando de este modo la especie extinta para siempre.
Durante años después de la extinción del alca gigante sus huevos y pieles fueron altamente cotizados por coleccionistas, llegando los precios de los huevos a alcanzar la misma cuantía que un trabajador ganaba a lo largo de 11 años de trabajo. A día de hoy aún se conservan 75 huevos de alca gigante en colecciones en distintos museos junto a un total de 24 esqueletos completes y 81 pieles
ALCA COMUN:
El alca común (Alca torda) es una especie de ave caradriforme de la familia Alcidae. Es la única especie de su género. es habitual en las colonias de aves marinas en el noroeste de Europa, con frecuencia menos llamativo debido a su preferencia por huecos en lugar de repisas abiertas.
Descripción:
El alca común tiene 38-43 cm de longitud, con una envergadura de 60-69 cm. Tiene las partes inferiores blancas y la cabeza, cuello, dorso y patas negras durante la temporada de reproducción. Una delgada línea blanca se extiende desde los ojos hasta el final del pico. Durante la temporada no reproductiva, la garganta y la parte trasera de los ojos se vuelven blancas, y la línea blanca en la cara se vuelve menos importante. El pico es de color negro, y es grueso de forma desafilada. La cola es puntiaguda. .
En verano tiende a ir a las bahías resguardadas y a los estuarios, más que el arao común. Se distingue por su estructura, y su cola erguida y apuntada le diferencia de la corta y cuadrada del arao común; la forma de la cabeza y del pico son las mejores pistas para identificarla de cerca.
Distribucion:
Cría en islas y en costas rocosas. En Europa, su área de distribución se extiende desde Islandia hasta el noroeste de Francia, e incluso llega hasta el norte de España, donde su presencia es rara. Cría en acantilados con cavidades o piedras. Extendido en invierno, acercándose a veces a la costa. Muy rara tierra adentro, incluso tras vientos fuertes.
En la costa oriental americana, llega por el sur hasta Maine.
Entre el 60 y el 70% de la población mundial de alca común anida en Islandia
Hábitat:
Su hábitat de reproducción es islas, costas rocosas y acantilados en el norte de la costa Atlántica, en el este de América del Norte hasta el sur de Maine (Estados Unidos), y en el oeste de Europa, desde el noroeste de Rusia hasta el norte de Francia. Las aves de Norteamérica migran en alta mar y en el sur, desde el Gran Banco de Terranova a Nueva Inglaterra. Las aves de Eurasia también invernan en el mar, con algunos moviéndose muy lejos, hasta el oeste del Mediterráneo.
Alimento y anidación
Estas aves buscan comida al nadar bajo el agua. Las alcas comunes pueden permanecer bajo el agua durante aproximadamente un minuto antes de ir a superficie. Atrapan a sus presas y se la comen bajo el agua. Se alimentan principalmente de peces, como el lanzón, arenque y capelán, también algunos crustáceos y gusanos marinos. Anidan en grandes colonias y ponen sus huevos en la roca o tierra. El cortejo incluye tocarse los picos y ambos sexos se siguen el uno al otro en figuras de vuelos elaborados. Cada uno irá a buscar alimentos, y después, volverá al nido para hacerse cargo del cuidado de los huevos o los polluelos. Para la alimentación de sus crías, pueden llevar hasta 20 peces al nido a la vez. También pueden volar más de 100 km hacia el mar para alimentarse, durante la incubación de huevos, pero cuando se trata del aprovisionamiento de los jóvenes, se alimentan más cerca de las zonas de anidación.8 La pareja estará unida por el resto de sus vidas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario